"Es encomiable que Marruecos acoja estas reuniones internacionales. Marruecos está presionando a la Asamblea General en nombre de los países de renta media que piensan como él", indicó el alto responsable de la ONU en una entrevista concedida a la MAP con motivo de estas Asambleas, que se celebran en Marrakech hasta el 15 de octubre.
A nivel de la ONU, Marruecos preside el Grupo de Amigos - Países de Renta Media (PRM), que es la categoría más numerosa de Estados miembros de la ONU, con 110 de los 193 miembros de la organización internacional.
La presidencia marroquí de este Grupo es un reconocimiento más del papel central que desempeña el Reino en la promoción y defensa de las prioridades de los países emergentes y en desarrollo en el seno de las Naciones Unidas, en consonancia con la visión real de un multilateralismo eficaz, activo y solidario.
Para el presidente de la Asamblea General de la ONU, los países miembros de este Grupo albergan al 75% de la población mundial y representan alrededor de un tercio del PIB mundial, "lo que los convierte, en su opinión, en un importante motor del crecimiento mundial".
Refiriéndose a la asociación entre Marruecos y las dos principales instituciones financieras internacionales, Francis destacó la larga relación entre el Reino y el Banco Mundial, marcada en particular por proyectos iniciados en los años sesenta.
La relación entre Marruecos y el FMI se remonta a 1958, con proyectos destinados a reforzar la resiliencia del Reino y su crecimiento económico, añadió, recordando la financiación de 1,3 mil millones de dólares aprobada recientemente por el Consejo Ejecutivo de la institución de Bretton Woods para Marruecos en el marco de la Facilidad de Resiliencia y Sostenibilidad.
Esta financiación tiene por objeto apoyar la transición de Marruecos hacia una economía más verde y contribuir a reforzar su preparación y resiliencia frente a las catástrofes naturales, en particular las vinculadas al cambio climático.
Refiriéndose al lugar que ocupa África en estas reuniones, Francis, que preside el principal órgano de formulación de políticas de la ONU, señaló que el continente sigue siendo una región "importante", que cumple su papel en la diplomacia multilateral y en la defensa del desarrollo internacional.