En una alocución pronunciada en nombre del ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, durante una reunión ministerial del CPS de la UA sobre la situación en Sudán, el embajador y representante permanente de Marruecos ante la UA y la CEA-ONU, Mohamed Arrouchi, reafirmó que el Reino de Marruecos está convencido de que no existe ninguna solución militar para poner fin al conflicto actual en Sudán.
Por ello, reiteró la necesidad de mostrar calma, dando prioridad al diálogo, uniendo las filas, preservando las instituciones nacionales del Estado e impidiendo cualquier injerencia exterior en los asuntos sudaneses, lo que agravaría aún más el conflicto y amenazaría la paz y la seguridad regionales, subrayó Arrouchi durante esta reunión celebrada por videoconferencia.
Marruecos reitera, una vez más, su profundo pesar por la transformación de los conflictos políticos entre hermanos en Sudán en enfrentamientos militares, durante los cuales se han perdido vidas y destruido bienes y que han tenido repercusiones negativas sobre la seguridad y la estabilidad de la región, añadió el diplomático marroquí.
El Reino de Marruecos, bajo el liderazgo de SM el Rey Mohammed VI, al tiempo que expresa su plena solidaridad con Sudán hermano en estas difíciles circunstancias, sigue dispuesto a prestarle todo el apoyo necesario y posible para ayudarle a superar la crisis, reiteró el diplomático marroquí.
El Reino, que mantiene fuertes relaciones fraternales con la República de Sudán, confía en la capacidad y la sabiduría del pueblo sudanés para alcanzar el consenso necesario para trazar una vía política que garantice la seguridad y la estabilidad del país, y crear las condiciones adecuadas para satisfacer las necesidades de desarrollo en beneficio de la población, afirmó Arrouchi.
A este respecto, el Reino reitera su llamamiento a contener la crisis sudanesa en el marco nacional (sudanés-sudanés) y a evitar las injerencias exteriores. Asimismo, confirma su confianza en la capacidad de las partes sudanesas para superar esta difícil etapa, adoptando el diálogo como único medio para resolver las diferencias, sostuvo el diplomático marroquí.
A este respecto, Marruecos insiste en que la primera clave de una solución política reside en el establecimiento de una confianza mutua entre las partes sudanesas y en el inicio de un diálogo constructivo, que tenga como prioridad el bienestar, la seguridad y la prosperidad del pueblo sudanés.
En este sentido, Marruecos recalca una vez más su aprecio por los esfuerzos realizados por Arabia Saudí y Estados Unidos para patrocinar y facilitar las rondas de conversaciones de Yeda, así como su preocupación por su éxito con el objetivo de lograr un alto el fuego, con el fin de proteger a los civiles, destacó Arrouchi, añadiendo que Marruecos saluda particularmente el resultado de las conversaciones de Yeda 2, con la participación de la organización IGAD, que también representa a la Unión Africana, con el fin de facilitar una ayuda humanitaria sostenida y aplicar medidas de fomento de la confianza entre las partes en conflicto.
El Reino expresa también su apoyo a todas las demás iniciativas encaminadas a atajar las causas de la crisis actual, con el fin de evitar el derramamiento de la sangre del pueblo sudanés hermano, preservar la unidad y la cohesión del Estado y de sus instituciones, y limitar las repercusiones negativas de esta crisis sobre la seguridad y la estabilidad de la región, reiteró el diplomático marroquí.
Marruecos se felicita de los signos alentadores que están surgiendo tras la reanudación de las negociaciones entre las dos partes en Yedda, expresando su esperanza renovada de alcanzar un acuerdo duradero que ponga fin a las hostilidades, allanando el camino para un debate sobre la posguerra, en particular en términos de reconstrucción y de respuesta eficaz a la difícil situación humanitaria, agregó Arrouchi.
Dada la situación extremadamente volátil y peligrosa en Sudán, la delegación del Reino reafirmó la solidaridad del Consejo con Sudán hermano para superar su crisis interna, y reiteró su firme apoyo a su seguridad, estabilidad, unidad nacional e integridad territorial.