"La agravación de la situación en la región requiere el abandono de la lógica de la gestión de la crisis, para pasar a la de la actuación para hallar una solución definitiva a este conflicto", dijo el Soberano en el discurso dirigido, el lunes por la noche, a la Nación con motivo de la Fiesta del Trono.
En este contexto, Su Majestad el Rey subrayó que el cese de la guerra en Gaza, que constituye una imperiosa necesidad urgente, debe hacerse paralelamente a la apertura de un horizonte político capaz de instaurar una paz justa y permanente en la región.
El Soberano resaltó también que recurrir a las negociaciones para reactivar el proceso de paz entre las partes palestina e israelí requiere bloquear el camino a los extremistas, estén donde estén, agregando que la seguridad y la estabilidad sólo se establecerán plenamente en la región en el marco de una solución de dos Estados, donde Gaza constituya una parte integral de los territorios del Estado palestino independiente, con su capital en Al-Quds oriental.
Su Majestad el Rey, Presidente del Comité Al-Quds, que ha trabajado para abrir una ruta sin precedentes para hacer llegar ayudas alimentarias y médicas urgentes a Gaza, señaló que "el interés que dedicamos a la situación interna de nuestro país, no nos hacen olvidar la tragedia que vive el pueblo palestino hermano".
Con el mismo compromiso responsable, SM el Rey aseguró que seguiría apoyando las iniciativas constructivas destinadas a encontrar soluciones prácticas para realizar un alto el fuego concreto y permanente y tratando la situación humanitaria.