En una alocución pronunciada en la inauguración del primer Foro Parlamentario anual para la Igualdad y la Paridad, Talbi Alami subrayó que el Soberano ha velado y sigue velando por colocar la protección de los derechos de la mujer y la preservación de su dignidad en el centro de las reformas llevadas a cabo por el Reino durante este cuarto de siglo.
Con esta ocasión, el presidente de la Cámara de Representantes expresó su profunda gratitud y su sincero agradecimiento a Su Majestad el Rey, “por haber concedido su Alto Patrocinio a este Foro, como expresión de la Alta Solicitud que Su Majestad concede a los derechos de la mujer y de la familia en general, así como a la equidad en todas sus dimensiones”.
En este marco, Talbi Alami destacó algunas reformas acumuladas por Marruecos para el empoderamiento en materia de derechos de las mujeres en particular, la adopción en 2004 del Código de la Familia, subrayando Altas Directivas Reales decisivas para garantizar una legislación justa para las mujeres, los niños y la familia en su conjunto, así como la reforma del Código de la Nacionalidad, que ha permitido a las madres marroquíes transmitir su nacionalidad a sus hijos.
Asimismo, se trata del recurso a la discriminación positiva para aumentar la representación de las mujeres en el parlamento y en las instituciones territoriales, la adhesión del Reino a varios convenios y mecanismos internacionales relacionados con los derechos de las mujeres, la adopción de la ley relativa a la lucha contra la violencia hacia las mujeres, la integración del empoderamiento económico y social de las mujeres en la legislación nacional y en las políticas públicas, y la adopción de un presupuesto sensible al género, enumeró.
La constitucionalización de los derechos de la familia y de las mujeres en todas sus dimensiones, y explícitamente del principio de no discriminación, constituyó un paso reformador decisivo y significativo, afirmó el presidente de la primera Cámara del Parlamento.
Según él, “si las disposiciones de la Constitución del Reino son ricas en garantías de los derechos humanos, incluidos los de las mujeres, el hecho de que el primer artículo del Título relativo a los Derechos y Libertades Fundamentales esté dedicado a la afirmación de que el hombre y la mujer gozan, en igual medida, de los derechos y libertades civiles, políticos, económicos, sociales, culturales y medioambientales enunciados en la Constitución, así como en las convenciones y tratados internacionales debidamente ratificados por Marruecos”, adquiere dimensiones nobles, un significado simbólico particular y “constituye un mensaje que debemos tener presente para el presente y el futuro”.
Talbi Alami subrayó, también, que “lo que hace único al modelo marroquí de reforma, tanto en este ámbito como en otros, es que se basa en el consenso, la consulta y la participación, fundamentándose en la valorización y acumulación, garantizando así su eficiencia, sostenibilidad y riqueza”, estimando que “estos elementos hacen que este modelo esté abierto a nuevos desarrollos y mejoras, en interacción y armonía con los instrumentos nacionales e internacionales”.
En este contexto, el presidente de la primera Cámara del Parlamento recordó “el compromiso de Su Majestad el Rey con lanzar un diálogo nacional y consultas para la revisión del Código de la Familia, veinte años después de su adopción”.
Para ello, recordó, Su Majestad encomendó a una instancia compuesta por instituciones constitucionales y departamentos gubernamentales la supervisión de este diálogo, la organización de amplias consultas y la celebración de sesiones de escucha con los distintos componentes de la sociedad, con el fin de recoger sus propuestas.
“Si hubiera que elegir un título para el modelo marroquí de reforma y desarrollo, sería necesariamente el de la constitucionalización e institucionalización de los derechos humanos, en cuyo centro figuran los derechos de la mujer, dotándoles de un contenido económico, social y cultural, además de su implementación institucional efectiva. Si hay una característica que debe acompañar este proceso de reforma, es la modernización y la contemporaneidad”, dijo.
El Parlamento marroquí desempeña un papel crucial en las reformas, en la evaluación de su impacto y en la apropiación de las mismas por la sociedad, indicó Talbi Alami, recordando, a este respecto, la evaluación de la ley 103/13 relativa a la lucha contra la violencia hacia las mujeres, llevada a cabo por la Cámara de Representantes durante el último año legislativo, entre otras iniciativas en los ámbitos de la legislación, el control y la diplomacia parlamentaria.
Consciente de la nobleza de la participación de las mujeres en materia de derechos, igualdad, paridad, equidad, empoderamiento y participación, la Cámara de Representantes ha velado por dedicar a la creación del Grupo de Trabajo Temático sobre la Igualdad y la Paridad una sección fija en su Reglamento, subrayó.
Saludando la dinámica que caracteriza este Grupo, tanto en su composición actual como en el pasado, Talbi Alami indicó que sus propuestas y actividades contribuyen a enriquecer el debate institucional y público sobre los temas que le han sido encomendados, así como a reflexionar y formular propuestas encaminadas a reforzar la igualdad y la paridad.
Este Foro se enmarca en esta perspectiva, concebido como un espacio de diálogo que reúne a diversas instituciones constitucionales, instancias de gobernanza y organizaciones de la sociedad civil defensoras de los derechos de las mujeres, explicó, afirmando que el objetivo principal es explorar enfoques y temas que contribuyan a fortalecer la igualdad y la paridad, en cumplimiento de lo establecido en nuestra Constitución y los compromisos internacionales suscritos por nuestro país.
Talbi Alami expresó, con esta ocasión, que este Foro, colocado bajo el lema “El Parlamento, palanca esencial para la igualdad y la paridad” contribuya a la concretización de ideas que puedan generar propuestas encaminadas a consolidar los logros alcanzados.