Si bien este día se ha convertido en una tradición profundamente arraigada en todos los países africanos, ya que representa el símbolo de la lucha de todo el continente por la liberación, el desarrollo y el progreso económico, se celebra este año en un contexto de agitación mundial causada por la pandemia del coronavirus que ha golpeado el planeta, indica la ASMEX.
Esta crisis sanitaria ha traído consigo una crisis económica sin precedentes cuyos contornos pueden remodelar las actuales potencias económicas mundiales, subraya la misma fuente, que señala que el continente africano cuenta más que nunca con todos las ventajas que le permitirán establecerse como potencia económica regional.
En efecto, Marruecos, bajo la dirección ilustrada de SM el Rey Mohammed VI, ha sido precursor en el desarrollo de su asociación con varios países africanos hermanos y amigos y es el primer inversor en África occidental y el segundo en el continente africano.