El primer eje, explica la FICC en un comunicado, se basa en un enfoque social dirigido a la juventud para facilitar su acceso a los espacios de la vida cultural y social, estimular el potencial creativo de los jóvenes y promover su desarrollo.
El segundo eje se basa en el desarrollo de las industrias creativas y culturales, para que las empresas y los profesionales que operan en estos sectores se beneficien de un ecosistema favorable al surgimiento de una verdadera economía de la creación que necesita visión, ambición, profesionalidad y movilización para construirse.
Desde el inicio de la crisis del Covid-19 en Marruecos, todos los sectores de las industrias culturales, creativas y de eventos fueron paralizados, subraya la Federación, precisando que 100.000 puestos de trabajo fueron directamente afectados por esta crisis sin precedentes y unas 1.100 empresas sufrieron una caída del 70% en su volumen de negocios en promedio.
El impacto económico de esta crisis es de 2 mil millones de dírhams en el sector de las industrias culturales y creativas, estima la FICC, dependiente de la Confederación General de la Empresas de Marruecos (CGEM).
Ante la urgencia de esta situación, la FICC propone varias medidas de urgencia para garantizar la reactivación del sector de las ICC, de las que destaca la exención de las empresas durante 6 meses de las cargas relacionadas con el Impuesto sobre la Renta (IR), la Caja Nacional de la Seguridad Social (CNSS) y el Seguro de Enfermedad Obligatorio (AMO en sus siglas en francés).
También propone crear un fondo especial de urgencia para apoyar a los profesionales del sector e incentivar las regiones y las colectividades territoriales para que comprometan rápidamente los presupuestos destinados a las actividades culturales y creativas para el año 2020, explica el comunicado.