En una aclaración en respuesta a las declaraciones hechas en varios sitios electrónicos por el ex detenido (H.M), liberado el 20 de julio de 2020, la DGAPR afirma que, respecto a la atención médica, este recluso ya se benefició de varios exámenes internos y externos, precisando que fue sometido, en el establecimiento penitenciario, a 50 exámenes de medicina general, 47 de odontología y un examen de dermatología.
En cuanto a los exámenes especializados en los hospitales públicos, la DGAPR indica que el detenido en cuestión tuvo derecho a dos exámenes a nivel del aparato digestivo, uno de dermatología y tres de oftalmología, así como a una intervención dental en la Facultad de Medicina Dental de Rabat, señalando que la persona en cuestión no se benefició de las demás citas médicas debido a su negativa a llevar el uniforme reglamentario exigido para transportar a los reclusos a los hospitales públicos.
En este sentido, la aclaración indicó que el detenido, que mencionó "la suciedad del uniforme", tenía derecho a un nuevo uniforme que debía llevar obligatoriamente cada vez que tenía una cita médica en el hospital público, como todos los otros detenidos, de conformidad con la ley.
En cuanto a la "tortura de los prisioneros", la DGAPR afirma que se trata de "declaraciones irresponsables sin cualquier fundamento", destacando que la administración y los funcionarios de la prisión "se comportan con todos los reclusos de conformidad con las disposiciones legales en vigor y que en caso de excesos, las autoridades jurídicas competentes son avisadas para hacer lo necesario".
Por otra parte, la DGAPR subraya que el detenido en cuestión ya había presentado una denuncia ante la fiscalía general en relación con las condiciones de su detención en la prisión local de Tiflet 2, señalando que esta denuncia se archivó por falta de pruebas, lo que explica la intención del ex recluso de transmitir mentiras tanto durante su período de detención como inmediatamente después de su liberación.