"Ahora voy a seguir en el club porque el presidente me dijo que la única manera de marcharme era pagar la cláusula de 700 millones de euros, que eso es imposible ", explicó Messi en una entrevista con el sitio web español Goal.com.
"Yo no iría a juicio contra el Barça nunca porque es el club que amo", agregó la estrella argentina.
El 25 de agosto, Messi inició los procedimientos para rescindir unilateralmente su contrato, en virtud de una cláusula que expiró el 10 de junio.
La cláusula permite al jugador decidir sobre su futuro después de cada temporada con acuerdo con la dirección del club.
Los dirigentes del club catalán y el clan Messi se reunieron, el miércoles por la tarde, durante más de dos horas, pero cada uno se mantuvo firme en sus posiciones: los representantes de Messi quieren negociar una salida inmediata, pero el Barça sostiene que su contrato vence hasta el 30 de junio de 2021.