La reunión pretende arrojar luz sobre el peligro del extremismo violento al que se enfrentan las comunidades de todo el mundo y reforzar los mecanismos para fomentar el diálogo inter-confesional y hacer frente al extremismo.
En su intervención, el wali de la región de Dajla-Ued Eddahab, gobernador de la provincia de Ued Eddahab, Lamine Benomar, subrayó que este encuentro internacional tiene como objetivo poner de relieve el peligro del extremismo violento al que se enfrentan algunas comunidades en el mundo.
Benomar también elogió los esfuerzos de URI por consolidar los valores de la paz y la tolerancia, señalando que anima a los ciudadanos a tender puentes entre las diferencias religiosas y culturales, a promover la cooperación permanente entre las religiones y a poner fin a la violencia religiosa.
El programa de esta 17ª edición de la Iniciativa de Religiones Unidas para la región de Oriente Medio y Norte de África incluye sesiones de diálogo, debate e intercambio de experiencias sobre la prevención del extremismo violento, con especial atención a los modelos de convivencia y tolerancia entre judíos y musulmanes en Marruecos y Palestina.
La reunión permitió a los participantes debatir temas relacionados con "el papel de los jóvenes en la prevención del extremismo violento", "el papel de la educación en la creación de resiliencia social y la prevención del extremismo y el terrorismo", "los factores relacionados con el extremismo violento" y "las prácticas relacionadas con la prevención del extremismo violento".