En respuesta a las preguntas orales en la Cámara de Representantes sobre "las causas y las repercusiones de los incendios forestales que se produjeron en algunas regiones de Marruecos", Sadiki explicó que la superficie amenazada de ser completamente arrasada por las llamas es de casi 123.000 hectáreas, agregando que los incendios casi alcanzaron, en la región de Larache, las viviendas de más de 5.200 familias, y que 35 duars se vieron amenazados.
El ministro aseguró también que los incendios están controlados hasta el momento, a excepción de un incendio forestal que se declaró este lunes por la tarde en el municipio de Tazrut y que está siendo atajado por aviones "Canadair".
El ministro señaló que hay algunos focos en las zonas afectadas que estallan de vez en cuando, pero que se contienen gracias a la rapidez de las intervenciones terrestres y aéreas necesarias, cuya prioridad absoluta es la preservación de las vidas de los intervinientes y de las poblaciones locales.