En este mensaje, el Soberano afirma haber recibido con gran emoción y profunda aflicción la noticia del fallecimiento del general de división jubilado Hamidou Laanigri, implorando al Todopoderoso que le rodee de su santa misericordia.
En esta dolorosa circunstancia, Su Majestad el Rey expresó sus profundas condolencias y sinceros sentimientos de compasión a la familia del difunto y a sus allegados tras esta cruel pérdida, siendo imparable la voluntad divina, rogando al Altísimo que les conceda paciencia y consuelo y que acoja al difunto Laanigri en su vasto paraíso.
El Soberano dice recordar, con estima, el sincero patriotismo, la disciplina, la dedicación y la abnegación del difunto al servicio de los intereses supremos de la Patria, cumpliendo con su deber nacional en las diferentes altas responsabilidades militares y de seguridad que desempeñó, con un apego indefectible a las constantes y sacralidades de la Nación y al glorioso Trono alauita.
Compartiendo el dolor de la familia del difunto Laanigri tras esta prueba, siendo imparable la voluntad divina, Su Majestad el Rey implora a Dios que recompense ampliamente al difunto por los loables servicios que prestó a su patria, y que lo acepte entre los virtuosos.