El número de muertos ascendió a 1.643 en la provincia de Al Hauz, mientras que no se registraron nuevas muertes en las demás provincias y prefecturas afectadas, precisa el ministerio, añadiendo que 2.884 de los fallecidos habían sido enterrados, que Dios los rodee con su santa misericordia y los acoja en su vasto paraíso.
Las autoridades públicas prosiguen sus esfuerzos para rescatar, evacuar y atender a los heridos y desbloquear las carreteras dañadas por el seísmo, al tiempo que movilizan todos los recursos necesarios para hacer frente a las repercusiones de esta dolorosa tragedia.