Entre ellas, los temas expuestos por Marruecos en materia de clima, salud y seguridad alimentaria, y su impacto en el disfrute de los derechos humanos en todo el mundo.
Zniber, que también es representante permanente de Marruecos en Ginebra, explicó los objetivos relacionados con los procesos relativos a las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial y sus efectos sobre los derechos humanos, como oportunidades y retos.
Los debates también se centraron en las relaciones entre el CDH y la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, incluido el apoyo de la Secretaría General a la labor del Consejo, tanto en términos institucionales como organizativos.
En el marco de su misión en Nueva York, Zniber también se reunió con varios altos responsables, entre ellos el presidente de la Asamblea General, Dennis Francis, el administrador general del PNUD, Achim Steiner, la directora ejecutiva de ONU-Mujeres, Sima Bahous, y los presidentes de algunas Comisiones de la Asamblea General relacionadas con la promoción y garantía de los derechos humanos en el sistema global de las Naciones Unidas.
El presidente del Consejo de Derechos Humanos había visitado previamente Washington, donde mantuvo sesiones de trabajo con los Vicepresidentes del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, respectivamente, con vistas a implicar más estrechamente a las instituciones financieras internacionales en la realización de los derechos sociales y económicos, en los ámbitos cruciales de la salud, la protección del medio ambiente, la educación y la igualdad de género, y también para invitarles a interactuar más con el Consejo y sus mecanismos pertinentes.
Zniber viajó también a la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington para reunirse con el presidente del Consejo Permanente, Chet Neymour, y el secretario general, Luis Almagro, en el marco de la consolidación de las relaciones con las organizaciones regionales, y para aprovechar las sinergias y las vías de intercambio de experiencias e información sobre la acción y el papel del Consejo en los distintos países interesados, en particular en lo que se refiere al refuerzo de las capacidades institucionales y humanas encargadas de las cuestiones de Derechos Humanos.