Destinado a acelerar la reparación de los daños y la reanudación de la actividad agrícola, este programa de gran envergadura abarca varios ámbitos. Entre ellos figuran la rehabilitación de caminos rurales, la distribución de ovejas y cabras a los agricultores afectados, la restauración de sistemas hidráulicos de pequeño y mediano tamaño, la modernización de estaciones hidrológicas, así como la rehabilitación de canales de riego (acequias), unidades de transformación y sedes de cooperativas.
En muchos duars de la provincia de Al Hauz, como El Bor y Marigha, los agricultores se están beneficiando de ayuda financiera para reconstruir y rehabilitar sus viviendas. Gracias a estos esfuerzos de reconstrucción, están celebrando la vuelta a la normalidad, encontrando un nuevo «hogar» y relanzando sus actividades agrícolas con gran determinación y entusiasmo.
En este contexto, Zineb Bensassi, jefa del Departamento de Ejecución de Proyectos del Sector de la Producción Agrícola, señaló que «tras el seísmo del 8 de septiembre, el Ministerio de Agricultura, Pesca, Desarrollo Rural, Agua y Bosques puso en marcha un programa de emergencia destinado a reconstruir el capital animal mediante la distribución de 138.879 quintales de cebada a 17.449 ganaderos» de la provincia de Al Hauz.
«Se distribuyeron 11.890 cabezas de ganado ovino y caprino a 1.189 ganaderos, y la operación sigue en curso», añadió en una declaración a la MAP, señalando que se han rehabilitado 43,2 km de acequias dañadas para relanzar el sector arborícola, además de la demolición de cuatro unidades de producción gravemente dañadas, la rehabilitación de 19 unidades para el desarrollo de productos agrícolas y la puesta en marcha de una plataforma de comercialización de productos locales en Asni.
En una declaración similar, Moulay Idriss Ben El Haj, uno de los ganaderos que perdieron su ganado en el seísmo, agradeció calurosamente el apoyo «continuo y organizado» y las diversas iniciativas destinadas a garantizar que los agricultores y ganaderos pudieran volver a sus actividades.
«Estas iniciativas nos dan seguridad. El apoyo prestado por el Estado y las partes implicadas nos ayudará a reconstruir nuestras vidas y continuar con la agricultura», añadió Ben El Haj, que se benefició de la operación de distribución de ovejas y cabras a los agricultores afectados.
Por su parte, Rachid Jadbak, otro beneficiario de duar de El Bor, alabó el «compromiso ejemplar y la movilización constante» de las autoridades provinciales y los actores institucionales, que supervisan y controlan constantemente los esfuerzos para apoyar y acompañar a los agricultores afectados.
«Esta ayuda ganadera es de vital importancia para nuestra supervivencia. Nos permitirá diversificar nuestra dieta y generar ingresos», declaró.
Es evidente que el programa de emergencia de reconstrucción, rehabilitación y mejora de la agricultura en las zonas afectadas por el seísmo está contribuyendo significativamente a reforzar los proyectos agrícolas y a acelerar el desarrollo de las zonas afectadas.
El objetivo de este programa es crear riqueza y diversificar las actividades para revalorizar los productos agrícolas locales, haciendo hincapié en la mejora de los ingresos de la población y la intensificación de la aplicación de la estrategia «Generación Verde».