En el marco de estos esfuerzos, se ha puesto en marcha un proyecto de restauración y renovación de los cimientos de algunas de las mezquitas afectadas, mientras que otras han sido parcial o totalmente reconstruidas.
En la región de Marrakech-Safi, el seísmo afectó a 1.504 mezquitas repartidas entre las provincias de Marrakech, Al Hauz y Chichaua.
En declaraciones a la MAP, el delegado regional del Ministerio de Habices y Asuntos Islámicos, Abderrahim Baghezli, señaló que las 382 mezquitas que sufrieron daños en Marrakech han sido sometidas a exámenes técnicos, y añadió que 50 de ellas serán reconstruidas total o parcialmente, mientras que otras 215 se beneficiarán de reparaciones ligeras o importantes.
Añadió que las obras de restauración comenzarán pronto en la mayoría de las 57 mezquitas de interés arqueológico e histórico, señalando que la mezquita Kutubia, que entra en esta categoría, ha sido restaurada de acuerdo con las normas internacionales.
También señaló que esta mezquita histórica fue reabierta durante el último mes bendito de Ramadán para la realización de las cinco oraciones y el Tarawih, después de que sus columnas y techos de madera y yeso fueran restaurados con la ayuda de equipos especializados en arquitectura, ingeniería civil y arqueología, entre otros campos.
Los habitantes y visitantes de la Ciudad Ocre han acogido con satisfacción la reapertura de la Kutubia en un tiempo récord, lo que ha permitido a más de 20.000 fieles, hombres y mujeres, realizar allí las oraciones del Tarawih durante el mes sagrado, dijo, subrayando la gran atención con que Su Majestad el Rey Mohammed VI, Amir Al Muminin, ha rodeado constantemente este edificio religioso milenario.
También están en curso las obras de restauración de la mezquita Al-Qasabine, situada en la plaza Yemaa el-Fna, tras haberse realizado todos los estudios arquitectónicos, técnicos y arqueológicos y haberse seleccionado a la empresa encargada de los trabajos.
Esta mezquita histórica, que data del siglo VI de la Hégira (583 AH/1187 AD), debe su nombre a las carnicerías, lugar donde fue construida durante el reinado de la dinastía almohade.
Según Baghazli, la mezquita ha sufrido graves daños, ya que el terremoto destruyó su minarete, mientras que los muros y las cúpulas quedaron muy afectados. Por ello, se han llevado a cabo obras urgentes para evitar que las partes restantes se derrumben, a la espera de que comiencen las obras de consolidación previstas para un futuro próximo.
Lo mismo ocurre con la mezquita de Moulay Yazid, cuyas cúpulas, columnas, muros y minarete han resultado dañados, por lo que ha sido necesario reforzar sus estructuras para limitar los daños.
El mismo funcionario aseguró que, de las 382 mezquitas dañadas, más de 290 habían sido abiertas tras la realización de las obras necesarias, lo que supone un porcentaje del 70%.
Cabe señalar que el Ministerio de Habices y Asuntos Islámicos había creado una unidad especial a nivel central para supervisar y aplicar el programa de rehabilitación de los edificios religiosos y los Habices afectados por el seísmo.
Las mezquitas milenarias de Marrakech, que figuran entre los monumentos religiosos y culturales más ilustres de Marruecos, también han estado asociadas a importantes funciones espirituales y sociales que han configurado gran parte de la historia local y nacional.
Con las obras de restauración y reconstrucción, estos monumentos seguirán encarnando el esplendor del patrimonio civil marroquí y el esplendor de su arquitectura única.