Las discusiones se centraron en los medios de reforzar la cooperación entre los dos países en el ámbito de la gestión religiosa, habida cuenta de su contribución al establecimiento de la paz, el refuerzo de la comprensión mutua, la lucha contra el extremismo y la consolidación de la estabilidad social.

En una declaración a la prensa al término de las conversaciones, Toufiq subrayó la importancia de la cooperación entre los dos países en el ámbito religioso, considerando que esta cooperación constituye una palanca eficaz para reforzar la paz internacional y la convivencia entre las religiones.

Con este motivo, reiteró el compromiso constante del Reino de cooperar con otros países al servicio de la paz y la seguridad.

Por su parte, el ministro delegado ante el ministerio etíope de la Paz, Kairedin Tezera Adera, se felicitó del enfoque promovido por Marruecos en favor de un Islam basado en la moderación, la paz y la tolerancia, valores que propugnan todas las religiones. Recordó también las buenas relaciones existentes entre Marruecos y Etiopía.

Por otra parte, el responsable puso de relieve el papel de los ulemas en la construcción de puentes capaces de favorecer el entendimiento entre los adeptos de las diferentes religiones y desterrar la violencia y el terrorismo, señalando que, durante esta visita, la delegación etíope conoció las virtudes de la moderación que caracterizan a los marroquíes.

En cuanto al presidente del Consejo Supremo Etíope de Asuntos Islámicos, Cheikh Haji Ibrahim Tufa, subrayó la condición de Marruecos como tierra de paz, conocida por su tradición de memorización y enseñanza del Corán, elogiando el papel de la Fundación Mohammed VI de Ulemas Africanos y su acción al servicio de los ulemas del continente, contribuyendo así a unir las filas de los musulmanes en todo el mundo.

A su vez, el delegado de la Iglesia Ortodoxa de Etiopía, Philipos Achagere, recalcó la importancia de trabajar por la consagración de la paz en el continente africano, afirmando que las religiones contribuyen a la consolidación de los valores humanos como la tolerancia, la convivencia y la justicia, así como al fortalecimiento de la cooperación entre las sociedades.