Entre las medidas presentadas figuran la reducción de los costes de producción y la apertura de los mercados a las importaciones de productos agrícolas, indicó Sadiki a la prensa al término de la reunión. Estas iniciativas se aplicarán de forma adecuada para proteger los productos locales, en particular la ganadería nacional, al tiempo que se trabaja para reponerlos con vistas a bajar los precios para los consumidores y los agricultores.
El ministro señaló también que las superficies de regadío a nivel nacional han disminuido de 1,8 millón de hectáreas a menos de 400.000 hectáreas. En la actualidad, los recursos hídricos para regadío no superan los 700 millones de metros cúbicos, frente a los 3,5 a 4 mil millones de las estaciones normales, explicó.
Por su parte, el presidente de la Confederación Marroquí de Agricultura y Desarrollo Rural, Rachid Benali, indicó que la reunión había brindado la oportunidad de examinar los medios de bajar los precios de los productos agrícolas, incluida la carne, y de movilizar los recursos hídricos para la próxima campaña agrícola, de acuerdo con las Altas Directivas Reales sobre la gestión del agua.
En una declaración similar, el presidente de la Federación de Cámaras de Agricultura marroquíes, Habib Bentaleb, afirmó que en la reunión se habían debatido los medios y medidas necesarios para garantizar un suministro regular, diversificado y asequible de productos agrícolas, ya sean hortalizas, frutas o productos animales, a los mercados nacionales.