“Por ello, Marruecos insiste sobre la imperiosa necesidad del respeto de la integridad territorial de los países africanos, rechazando cualquier injerencia en los asuntos internos de los países, particularmente aquellas que tienen por objetivo el desgarro del continente y su colocación sobre sendas de inseguridad, guerras y anarquía, afirmó el Soberano en un mensaje dirigido el lunes a los participantes en la tercera Cumbre África-Unión Europea, cuyos trabajos se han abierto hoy en Trípoli.
“La desestabilización de los países africanos sólo aprovechará a los grupos terroristas que intensifican cada vez más su activismo en nuestras regiones. Así pues, nuestras acciones en materia de lucha contra las amenazas trasnacionales, tales como el terrorismo, la piratería, la criminalidad transnacional, el tráfico de todo género y la toma de rehenes, son indispensables en el marco de una cooperación reforzar en los planos nacional, subregional e internacional, según un enfoque solidario y una metodología inclusiva que implique al conjunto de los países concernidos”, subrayó SM el Rey.
El Soberano indicó que en este contexto de las amenazas trasnacionales, “constatamos con inquietud la reciente escalada de las actividades terroristas, que tienen por objetivo desestabilizar a la región y atentar contra la seguridad de los países de la banda sahelo-sahariana”, añadiendo que la precariedad de la situación de nuestra región y los numerosos desafíos resultantes de la misma, nos conciernen a todos y ponen en evidencia la necesidad de una intensa cooperación regional e internacional y de un enfoque integrado en los dominios de la seguridad y del desarrollo.
SM el Rey destacó que la migración y el desarrollo constituyen un reto estratégico en el interior del continente africano, y del mismo modo, entre África y la Unión Europea.
“A este respecto, Marruecos llama a un refuerzo de las sinergias entre los movimientos migratorios y las estrategias de desarrollo, en conformidad con la visión que conjuntamente hemos aceptado desde 2006, en Rabat y aquí también en Trípoli en el curso de nuestros primeros diálogos euroafricanos sobre la migración y el desarrollo”, dijo el Soberano haciendo hincapié en la necesidad de obrar conjuntamente para la implicación de las comunidades emigradas en el desarrollo económico y social de sus países de origen.
El Soberano afirmó, por otra parte, que el cambio climático es más que una cuestión medioambiental, ya que afecta de manera profunda la salud, la seguridad alimentaria, la estabilidad y el bienestar de las poblaciones. De igual modo tiene consecuencias negativas sobre la seguridad humana en su conjunto y puede constituir un serio motivo de las tensiones y los conflictos, añadió SM el Rey destacando que el cambio climático es de dimensión planetaria, pero África es el continente más vulnerable y expuesto a sus nefastos y a veces devastadores efectos.