La escuela Omori, situada en Ota City, una las 23 municipalidades de Tokyo, cuenta con 398 alumnos de 12 a 15 años y 21 profesores. Es una brillante escuela asociada de la UNESCO desde 2011.
La escuela Omori de Tokio concluyó el año pasado un hermanamiento con la Escuela Cinturón verde de Rabat tras la visita del presidente de la Fundación Goi Peace a la Capital y desde entonces la escuela nipona incluye las prácticas de la preservación del medio ambiente en sus actividades, inspirándose en actividades y prácticas llevadas a cabo por los profesores de las escuelas ecológicas en Marruecos en cooperación con el departamento de la Educación Nacional.
SAR la Princesa Lalla Hasnaa fue recibida en el gimnasio por los alumnos de la escuela Omori que propusieron a Su Alteza Real, como muestra de bienvenida, un florilegio de cultura japonesa: artes marciales, caligrafía, baile.
Después, SAR la Princesa Lalla Hasnaa se informó, con interés, de las actividades que realizan en el marco de su educación al desarrollo sostenible.
Así, su Alteza Real tomo conocimiento de que los alumnos de Omori participan en el mantenimiento de las zonas verdes de la estación de Okayama, situada frente a su escuela, donde, junto con voluntarios adultos, eliminan las malas hierbas, riegan y cuidan macizos de flores.
Su Alteza Real se interesó por las plantas trepadoras que cultivan como cortinas verdes por encima de las ventanas de la escuela para protegerlos naturalmente del sol.
También, SAR la Princesa Lalla Hasnaa se informó de su implicación en la conservación del parque de Senzoku-Ike, donde ayudan a las luciérnagas, un pequeño insecto que había desaparecido de la región, a establecerse y desarrollarse.
Cada día de octubre a junio, los colegiales van al parque con Yokohama Firefly Association para ocuparse de este elemento de biodiversidad.
Su Alteza Real apreció, también, el modo en que aprenden a reducir las pérdidas alimentarias, y reciben una educación para luchar contra los efectos de las catástrofes y para comprender el mundo en el cual viven, y contribuir así a la paz.
SAR la Princesa Lalla Hasnaa se mostró impresionada por el canto de la paz, canción original escrita por los alumnos y compuesta por los profesores y que entonaron delante de Su Alteza Real, antes de ofrecerle un regalo como muestra de gratitud por su venida.
La escuela Omori de Tokio recibió varios premios: el premio al mejor proyecto UNESCO de Educación al Desarrollo sostenible (2012), el del establecimiento sostenible por el Ministerio japonés de la Educación Nacional (2016), y el de la escuela comprometida en la aproximación institucional global de la UNESCO (2016).