En un artículo de su director de redacción, François Soudan, la revista panafricana escribe en su último número que toda la gestión de la respuesta a la pandemia en Marruecos lleva la marca de un Soberano que, desde el principio, prescribió la mayor parte de las medidas drásticas adoptadas en un contexto de voluntarismo político y sanitario.
En este artículo, “Jeune Afrique” repasa en detalle las medidas tomadas por Marruecos, de conformidad con las Altas Orientaciones Reales, para contener la epidemia del nuevo virus.
"El primer caso de Covid-19 fue detectado el 2 de marzo en el Reino. El 15 de marzo fue creado un fondo especial dedicado a hacer frente a la pandemia con un presupuesto de 10 mil millones de dírhams (casi 915 millones de euros)", señala la revista, recordando que el 16 de marzo se cerraron las escuelas y universidades.
"Además de esta capacidad de respuesta, lo que llama la atención de los observadores es también la adaptabilidad que la industria marroquí ha mostrado durante la crisis. Reconfigurar la herramienta industrial para la producción intensiva de mascarillas, gel hidroalcohólico y respiradores hasta el punto de poder exportarlos a Francia, México, Arabia Saudita o Sudáfrica, es una hazaña que no nos esperábamos", subraya “Jeune Afrique”.
"Para ello, muchos empresarios y start-up han utilizado soluciones digitales innovadoras -en particular en el intercambio de información- que serán los aceleradores del mañana de la transición digital del Reino", escribe la revista.
“Jeune Afrique” también se ha interesado por las medidas socioeconómicas puestas en marcha conforme a las Orientaciones Reales y que permitirán a Marruecos "salir indudablemente del choque en una situación social menos degradada que la de sus vecinos".
La revista panafricana también puso de relieve la decisión del Reino de enviar ayuda médica "fabricada en Marruecos" a varios países africanos.