Marruecos "ha logrado establecer relaciones de buena vecindad y consagrar una cultura de comunicación y diálogo a través de sus valores de cooperación, solidaridad y compromiso con las buenas acciones y basándose en las iniciativas de los reyes y sultanes del Estado marroquí ancestral", señaló el centro en un análisis.
Las iniciativas humanas del Reino continúan hasta el día de hoy en pleno crisis del coronavirus, señala el centro, citando el ejemplo del envío de "toneladas de ayuda médica y sanitaria" a muchos países africanos, por Altas Instrucciones de SM el Rey Mohammed VI, Amir Al Muminin.
Estas relaciones no fueron una táctica coyuntural, ni el resultado de factores impuestos por las circunstancias actuales marcadas por la necesidad de trabajar dentro de grandes agrupaciones socioeconómicas o de explotar las crisis y los conflictos para imponer opiniones u orientaciones, sostiene el centro, subrayando que estos vínculos están sostenidos por los valores de fraternidad, solidaridad, sentimiento de humanidad compartida y destino común, y la inviolabilidad del ser humano.
Estas iniciativas han llevado a varios países a mantener con el Reino lazos marcados por el humanismo en todas sus aspectos, elevando así las relaciones con Marruecos al nivel de una comunicación espiritual y diplomática basada en el afecto, la fidelidad, la pureza y la bondad.
Esta comunicación espiritual mantenida por el Reino, sostiene Massaq, "ha preservado a muchos países de los peligros de las guerras y los conflictos, y les ha ahorrado conflictos innecesarios", recordando que Marruecos siempre ha procurado unificar las filas, evitar los desacuerdos y favorecer relaciones en las que todos ganan.
El Centro Massaq subrayó que Marruecos ha adoptado la comunicación espiritual y religiosa, mediante la promoción del sufismo marroquí en varios países, lo que permitió a las relaciones ir más allá de las formas de cooperación económica y el intercambio de pericias para abarcar la protección de las almas y el establecimiento de la seguridad y la tolerancia, mediante la diplomacia espiritual dirigida por SM el Rey Mohammed VI.
El Centro Massaq se creó en 2018 en Fez con el objetivo de construir una economía del conocimiento, promover la cultura como factor de desarrollo y crear oportunidades de éxito y excelencia para todos a través de proyectos de inversión cultural que tienen por objeto valorizar el capital simbólico marroquí, en este caso los conocimientos y las habilidades, las costumbres y los valores nacionales ancestrales.