En esta ocasión, Ameur subrayó que el logro del joven Salah Eddine es "un motivo de orgullo" para su familia, su escuela, la comunidad marroquí, Bélgica y la Madre Patria, Marruecos.
"Su hazaña no sólo es una fuente de alegría y un motivo de orgullo, sino también una prueba más del éxito de la integración de los hijos de la comunidad marroquí que viven en Bélgica", dijo Ameur.
"Los jóvenes marroquíes en Bélgica sienten un gran orgullo y necesitan modelos de éxito y referencias sobresalientes para avanzar en sus diferentes caminos", señaló, añadiendo que "Marruecos se enorgullece de ver a sus hijos brillar en todo el mundo".
En una declaración a la MAP, el joven prodigio, que estaba rodeado de miembros de su familia y amigos, expresó su orgullo por este homenaje que le rindió el embajador de Marruecos y su compromiso de no escatimar esfuerzos para avanzar en su viaje y contribuir a la proyección de su país.