En un artículo titulado "Los esfuerzos diplomáticos sostenidos de Marruecos para la solución de la crisis libia", el instituto esloveno afirmó que Marruecos preservó su calidad de mediador neutral para las partes libias, señalando que recurrir a la intervención de Marruecos para mitigar las diferencias se prosiguió después de la entrada en vigor del acuerdo Sjirat, en particular después de la decisión del Consejo de Seguridad de reconocer el acuerdo como el único marco jurídico para poner fin a la crisis libia.
La autora del artículo, Faiza Koubi, investigadora en relaciones internacionales de la Universidad Mohammed V de Rabat, subrayó que las frecuentes reuniones de los jefes de los dos órganos legislativos de Libia en Marruecos son una prueba de la voluntad real de los libios de trabajar con un socio capaz de prestarles un apoyo incondicional y desinteresado.
Koubi destacó que la diplomacia marroquí se distinguió por su compromiso a favor de una solución pacífica interlibia mediante la movilización de la vía oficial y la diplomacia parlamentaria, que contribuyeron a reforzar la política de Marruecos de neutralidad positiva y activa hacia Libia.
El ritmo sostenido de las visitas de las partes libias a Marruecos desde el verano de 2020 demuestra su predisposición a volver a la mesa de negociaciones después de la lasitud constatada debido a la persistencia del enfrentamiento, prosiguió la autora, sosteniendo que esto explica las dos declaraciones simultáneas del alto el fuego del Gobierno de Unidad Nacional y el Parlamento de Tobruk.
Desde la firma del acuerdo de Sjirat y su aprobación por la comunidad internacional, Marruecos continuó trabajando para apoyar la aplicación del acuerdo y el respeto de la legitimidad internacional, observó Koubi.