El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, afirmó al ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, durante la llamada telefónica que mantuvieron el viernes, que la administración de Biden no daría marcha atrás en este reconocimiento consignado en la Proclamación firmada en diciembre pasado por el presidente Trump, reveló "Axios".
Según el medio de comunicación estadounidense, el acta del Departamento de Estado relativa a la llamada telefónica de Blinken con Bourita no mencionó la cuestión del Sáhara, pero "dos fuentes bien informadas sobre la llamada confirman que fue debatida y que Blinken afirmó que la administración Biden no se retractaría" de esta decisión.
Los altos responsables de la Casa Blanca y del Departamento de Estado mantuvieron múltiples debates sobre esta cuestión en las últimas semanas, agregó la misma fuente.
Según el autor del artículo, que está muy al corriente de la política exterior estadounidense, la decisión que salió de estos debates es que los Estados Unidos "no darán marcha atrás" en la Proclamación que confirma la marroquidad del Sáhara, al tiempo que trabajan por el nombramiento de un nuevo enviado de la ONU para el Sáhara y la reanudación del proceso político con vistas a una solución definitiva sobre la base de la iniciativa marroquí de autonomía.
Durante la reunión entre Blinken y Bourita, el secretario de Estado norteamericano destacó la "asociación estratégica de larga data" que une entre Marruecos y Estados Unidos", congratulándose de la "larga y mutuamente beneficiosa relación bilateral basada en valores e intereses compartidos en materia de paz, seguridad y prosperidad regionales".
"El secretario de Estado y el ministro (Bourita) debatieron las reformas de gran envergadura" emprendidas bajo dirección de SM el Rey Mohammed VI en las últimas dos décadas, indicó el Departamento de Estado norteamericano en un comunicado.
Durante estas conversaciones, el jefe de la diplomacia estadounidense "saludó el liderazgo" del Soberano en la lucha contra el cambio climático y la inversión en las energías renovables, animando a Marruecos a "ayudar a promover el crecimiento económico y el desarrollo verde en África".
Los dos ministros hablaron también de "las posibilidades de aumentar la cooperación en África para promover la prosperidad económica y la estabilidad". Blinken destacó en este sentido "el papel clave de Marruecos en la promoción de la estabilidad en el Sahel y en Libia”.