Los ingresos ordinarios netos (sin incluir la parte del impuesto sobre el valor añadido que se paga a las colectividades territoriales) deberían alcanzar unos 262,6 MMDH, lo que supone un aumento del 10,8% con respecto a la Ley de Finanzas de 2021.
En cuanto al importe global de los gastos se establecería en cerca de 335,3 MMDH (incluyendo los de los servicios del Estado gestionados de forma autónoma), lo que supone un aumento del 8,8% respecto a las previsiones de la LF-2021, precisa el informe, que se publica en la página web del Ministerio de Economía y Finanzas.
Este nivel previsto de ingresos ordinarios debería superar el registrado antes de la crisis, situándose en 252,8 MMDH en 2019, mientras que el de gastos representaría el 27,4% del PIB en 2022, agrega la misma fuente.